El primer paso para hacer una lectura del Tarot es tener una baraja propia. Las Cartas deben ser nuevas, compradas o regaladas, pero nunca deben ser prestadas. Antes de utilizadas, las Cartas deben ser purificadas y protegidas ya que trabajarás con energías poderosas y desconocidas, relacionadas con el inconsciente colectivo. Además, si le harás la lectura a otra persona, es igualmente importante no relacionar tu karma con el suyo. Conoce cómo realizar el ritual para purificar y proteger tus Cartas del Tarot.
El Tarot es un cúmulo de conocimientos antiguos. Está relacionado con mitos y transmite su mensaje a través de La Simbología atribuida a sus ilustraciones y dibujos. Existen diferentes versiones: el Tarot Egipcio (o de Etteilla), el Tarot de Marsella, el Tarot Rider, el Tarot de Lenormand, el Tarot de Eliphas Levi, el Tarot Belline, el Tarot Esotérico, entre otros.
Índice
¿Por qué Purificar y Proteger las Cartas del Tarot?
Antes de iniciar tu lectura debes purificar y proteger tu baraja del Tarot. Este paso es fundamental por varios motivos: estás sujeto a lidiar con una carga energética universal muy poderosa y desconocida. Cuando haces la lectura del Tarot a otra persona, las energías personales pueden interrelacionarse y, por ese motivo, debes proteger a ambos relativamente de esa posibilidad.
Este ritual también permite pedir una guía al Yo superior de modo que tu lectura conduzca solo al bien y a iluminar la verdad y, en caso de que realices una lectura errada, que esta no produzca energías negativas ni consecuencias funestas.
Ritual de Purificación y Protección de la Baraja del Tarot
Antes de seguir, escoge un día que no sea feriado ni esté asociado a una energía especial. Dos de los días del calendario con este tipo de energía son el día 23 de junio y el Jueves Santo.
La elección de la hora es igualmente importante. Nunca se debe realizar este ritual de noche, pues lo que se busca es la luz y la consciencia y la noche vibra con otro tipo de energía.
Para hacer tu ritual necesitarás:
- 1 mantel blanco
- 1 vela blanca
- 1 bolsa de tela blanca
Escogidos el día y la hora, procede de la siguiente forma:
- Coloca un mantel blanco en una mesa y, encima, las Cartas del Tarot debidamente ordenadas.
- Enciende una vela blanca frente a la baraja y pasa cada Carta por la llama de la vela, por delante y por detrás.
- Una vez ahumadas todas las Cartas, haz una pequeña meditación u oración de protección.
- Deja arder la vela, sin tocar las Cartas intentando evitar a entrada de extraños en la habitación.
- Cuando se apague la vela, envuelve las Cartas en la bolsa de tela blanca y guárdala dentro de un cajón resguardado en tu habitación durante toda la noche.
Después de efectuar el ritual para purificar y proteger tus Cartas del Tarot, es conveniente traerlas contigo varios días para magnetizarlas con tu propia energía. Después, puedes guardarlas en la misma bolsa de tela o en una caja de madera. Evita mantenerlas en una caja de metal o de piel de animal.
Cuando hagas tu lectura, usa un mantel blanco o verde. Evita manteles rojos o negros. Usa tus Cartas con respeto y solo para el fin para el cual están destinadas. Nunca las des a otra persona para usarlas por sí misma. Cada uno debe usar solo sus propias Cartas del Tarot.
Después de purificar y proteger tus Cartas puede iniciar tus lecturas. Sin embargo, para eso, debes conocer el significado y el simbolismo asociado a cada una de ellas. Solo así conseguirás hacer una interpretación correcta del mensaje que pretenden transmitir. El estudio de las ciencias humanas, de la psicología y de los mitos también pueden ser de gran utilidad para desvelar el mundo mágico del Tarot.